Argentina: Dimite Procurador General tras acusaciones de Boudou y el lavado de dinero en el caso Ciccone

El titular de la Procuración General de la Nación, Esteban Righi, renunció anoche a su cargo tras la denuncia presentada ante la Justicia por el vicepresidente Amado Boudou por supuesto tráfico de influencias del estudio jurídico de los Righi.

La información fue publicada por el diario Página 12 en su edición de hoy. Hasta las 8 de la mañana, nadie confirmó oficialmente la noticia.

Righi había jurado como jefe de los fiscales nacionales en junio de 2004, en un acto que realizado en el Salón Blanco de la Casa Rosada y encabezado por el entonces presidente Néstor Kirchner.

El saliente funcionario, quien reemplazó en su momento al menemista Nicolás Becerra, deberá ser ahora reemplazado con una persona propuesta por el Gobierno, pero que deberá contar con aprobación del Senado.

Qué pasó

El ex procurador decidió dar el paso al costado molesto por el ataque que, interpretó, lanzó Boudou en su contra. El jueves pasado, el vicepresidente aseveró que tres abogados del estudio que fundó Righi lo habían visitado cuando era jefe de la Anses y luego como ministro de Economía para ofrecerle "aceitar" su relación con la Justicia Federal.

Se trata del estudio jurídico García, Labat, Musso y Righi, en el que trabajan Ana María García y Federico Righi, esposa e hijo, respectivamente, del renunciante; María José Labat, mujer del ex juez federal y actual ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro; y el letrado Fabián Musso.

De todos modos, Boudou fue más allá de las críticas públicas cuando ayer concurrió a Tribunales por medio de sus abogados y presentó una denuncia por supuesto tráfico de influencia contra, principalmente, la mujer de Righi.

Demanda

El vicepresidente subió la apuesta en la estrategia con la que busca defenderse por el caso Ciccone. Su abogado, Eduardo Durañona, radicó una denuncia contra el estudio del procurador general de la Nación y Adelmo Gabbi que quedó a cargo del juez Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lello.

Luego de sus denuncias en el Senado, Amado Boudou se presentó hoy en la Justicia federal contra el estudio de Esteban Righi y contra Adelmo Gabbi.

El vicepresidente subió de este modo la apuesta y denunció esta mañana en la Justicia al estudio del procurador general de la Nación y al titular de la Bolsa de Comercio. Su abogado, Eduardo Durañona, radicó una denuncia que quedó a cargo del juez Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lello.

En la denuncia, Boudou reprodujo los dichos del jueves pasado en el Senado, cuando en un monólogo acusó al estudio del procurador general de la Nación, Esteban Righi, de ofrecerle aceitar sus vínculos con la Justicia federal, que funciona en Comodoro Py.

Y también, al empresario Adelmo Gabbi de proponerle su intermediación con la empresa Boldt, a través de una suma de dinero.

La causa quedó radicada en el juzgado de Ariel Oscar Lijo y bajo la tramitación del fiscal Jorge Felipe Di Lello.

La denuncia fue firmada por el vicepresidente y presentada por su amigo y abogado dr. Eduardo Durañona, poco después de las 9 de la mañana de ayer lunes.

Otro juez en el banquillo ?

El representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, dr. Hernán Ordiales, presentó el lunes una denuncia contra el juez federal Daniel Rafecas por supuestas irregularidades en su desempeño en la causa Ciccone, donde investiga al vicepresidente Amado Boudou.

El flamante caso contra Rafecas avanza con toda celeridad: ya tuvo su primer testigo. Ayer hizo una "presentación espontánea" ante el Consejo el abogado Ignacio Danuzzo Iturraspe, que, en línea con declaraciones previas de Boudou, dijo que el magistrado le había recomendado cómo actuar en el caso Ciccone.

Fuentes del juzgado de Rafecas dijeron a La Nacion que el abogado era amigo del juez desde hacía 20 años y que los diálogos existieron, pero que Rafecas jamás lo asesoró sobre qué hacer en la causa.

La denuncia de Ordiales se basa en los dichos del jueves pasado del vicepresidente, que acusó a Rafecas de ser parte de una "mafia judicial", de haber hecho de su juzgado una "agencia de noticias" y de haber dado un inexplicable giro: según Boudou, primero parecía querer "ayudar" y ahora buscaba perjudicarlo. El vicepresidente dijo que en esa supuesta primera etapa Rafecas le había mandado un mensaje de texto a Danuzzo, ligado a José Núñez Carmona (íntimo amigo y socio de Boudou) recomendándole qué hacer. "Che, salgan con la nota que eso no pasa nada", decía el mensaje, según el vicepresidente.

Danuzzo se acercó ayer al Consejo, sin haber sido citado, minutos después de que el kirchnerismo presentara la denuncia, pasadas las 16.

Según informó a La Nacion un funcionario que accedió al testimonio, dijo que era abogado de Núñez Carmona y que conocía a Rafecas desde hacía tiempo porque era amigo del hermano del juez. Afirmó que había mantenido una conversación con él y que éste lo había orientado sobre cómo actuar en la causa. Como prueba, entregó copia de supuestos chats intercambiados con el juez. El testimonio duró cerca de una hora y fue ante Ordiales, el académico kirchnerista Manuel Urriza -que preside el organismo- y la secretaria del Consejo, Susana Berterreix.

Danuzzo es además director de Hábitat Natural SA, de la que son socios José María Núñez Carmona y Boudou, que -según su declaración jurada de 2010- es dueño del 50%.

La oposición cuestionó ayer con dureza las novedades del caso contra Rafecas; desde sus filas afirmaron que Ordiales montó ayer una "farsa" en el Consejo para "apretar" al juez que investiga al vicepresidente.

Rafecas no hizo declaraciones. Fuentes de su juzgado relataron que Danuzzo era una persona de máxima confianza de él y su familia. Relataron que le pidió una audiencia en febrero, preocupado por su situación personal, ya que figuraba formalmente como director suplente de una de las sociedades. Cuentan que Rafecas lo vio alterado y le transmitió tranquilidad, y que luego mantuvieron un diálogo de chat "íntimo y coloquial", que no debía trascender a terceras personas, con intercambio de opiniones informales, sobre todo acerca de lo que decían los medios. Según estas fuentes, Rafecas de ninguna manera lo asesoró.

"Esto es todo una farsa", dijo ayer el consejero radical Mario Cimadevilla. "Lo que hizo Ordiales es poco serio -afirmó-. La denuncia debe sortearse y es el consejero sorteado quien debe instruir la investigación y tomar las medidas del caso." Cimadevilla adelantó que evaluarán pedir la nulidad del testimonio. Desde el kirchnerismo, en cambio, afirman que no es la primera vez que se le toma declaración así a quien hace una "presentación espontánea".

"En este caso no había motivos. El testigo podía declarar cuando correspondiera -afirmó el radical Oscar Aguad-. Como tiene mayoría, el oficialismo cree que puede hacer lo que quiere. Esto es una prueba más de que usan al Consejo para apretar jueces: ahora aprietan a Rafecas."

En su presentación, Ordiales no dijo si pretende que se destituya o se sancione al juez. "Todavía es prematuro evaluar la sanción", afirmó.

Las claves

La denuncia. El kirchnerismo denunció ayer al juez Daniel Rafecas, que investiga al vicepresidente, ante el Consejo de la Magistratura. No precisó si pretende la remoción o una sanción.

Los argumentos. La denuncia reprodujo las acusaciones de Amado Boudou, que ligó al juez a una "mafia judicial", afirmó que Rafecas le había recomendado cómo actuar a un abogado del caso y denunció que el juzgado era "una agencia de noticias".

El primer testigo. Minutos después de la denuncia, se presentó un abogado, vinculado con un amigo de Boudou, que declaró que Rafecas le había aconsejado cómo actuar en el caso Ciccone.

La respuesta. El juez no contestó, pero en su juzgado informaron que el abogado era un amigo de confianza de Rafecas, que sí había hablado del caso con él pero que no le dijo qué hacer.

El Consejo. El kirchnerismo tiene mayoría en el Consejo, pero no alcanza solo los dos tercios necesarios para remover a un juez.

(Publicado por El Clarín y La Nación - Argentina, 10 abril 2012)
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