Cumbre
Países en desarrollo reclaman por ser excluidos de negociaciones
Los países africanos y varios latinoamericanos, entre estos Ecuador, tuvieron un argumento para esta mañana ausentarse de las reuniones en Copenhague, Dinamarca. Se sienten excluidos de las negociaciones en la Cumbre Mundial de Cambio Climático.
En contacto telefónico desde la capital danesa, Carolina Zambrano, secretaria de Cambio Climático, contó que en estos días “se han realizado cenas y reuniones a puerta cerrada entre ministros y delegados de los países como Estados Unidos, de la Unión Europea, China e incluso Brasil. Allí se han discutido los nuevos compromisos sobre la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Pero todo de acuerdo a sus intereses”.
La delegada de Ecuador se lamentó que ni los presidentes ni los ministros de los países latinoamericanos hayan sido considerados para estas reuniones. “Ellos recién empezarán a llegar entre este martes y miércoles, de acuerdo a las invitaciones que recibieron. A diferencia de los países desarrollados que tuvieron a sus ministros desde días anteriores”.
A eso se suma “nuestra desventaja numérica de delegados frente a las otras delegaciones. Eso impide que participemos en todas las reuniones de negociaciones (al menos 12 simultáneas)”.
Por Ecuador participan dos delegados de Cancillería, cuatro del Ministerio del Ambiente; Patrimonio Natural, Recursos no Renovables, Ministerio de Agricultura y la Secretaría de Gestión de Riesgos y Senplades con un representante cada uno.
La ministra del Ambiente, Marcela Aguiñaga, llegó esta mañana a Copenhague y a partir del miércoles arribarán la ministra de Patrimonio, María Fernanda Espinosa y el canciller Fander Falconí.
La delegación ecuatoriana presentará la Iniciativa Yasuní-ITT (busca dejar el crudo bajo tierra en el bloque Ishpingo-Tambococha-Tiputini), el programa Socio Bosque (conservación de los bosques primarios a través de incentivos económicos) y un plan de energías renovables como sus principales propuestas.
Zambrano también ratificó que Latinoamérica no tiene una posición común en Copenhague y eso le ha puesto en desventaja. Incluso que Jamaica, pese a ejercer la presidencia de la región, prefirió alinearse con el grupo de las islas pequeñas.
(Publicado por El Comercio – Ecuador, 15 diciembre 2009)
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