Juicio - Corrupción
Brasil: Condenan a mano derecha de Lula por compra de votos y corrupción
El exministro brasileño José Dirceu, principal acusado en el llamado juicio del siglo, fue condenado por la Corte Suprema a 10 años y 10 meses de prisión por su responsabilidad en la compra de votos en el Congreso durante el gobierno de Lula.
Dirceu, un abogado de 66 años y exjefe de Gabinete entre 2003 y 2005, fue presentado por los jueces como el mayor responsable de la red de sobornos a congresistas que operó durante el primer gobierno de Luiz Lula da Silva, según el Supremo Tribunal Federal (STF).
"La responsabilidad del procesado es extremadamente elevada. Él se valió de sus posiciones de mando y prominencia, tanto en el Partido de los Trabajadores como en el gobierno federal" para incurrir en delitos de corrupción, señaló el magistrado Joaquim Barbosa, relator del proceso.
El STF también sentenció a José Genoino, expresidente del Partido de los Trabajadores (PT), de izquierda y que gobierna Brasil, a seis años y 11 meses de prisión por su participación en el esquema de corrupción.
"Genoino se valió de la influencia que tenía en el PT para distribuir recursos millonarios. Un hecho relevante: la banda se mantuvo activa por dos años y cumplió su objetivo, el pago de apoyo. Genoino colaboró a poner en riesgo el sistema republicano en contra de la Constitución", dijo Barbosa.
La sesión fue suspendida durante el juzgamiento de Delúbio Soares, el tercer involucrado en el caso de corrupción, cuya pena es analizada por la Corte.
Por el crimen de asociación ilícita, el extesorero del PT ya fue condenado a dos años y tres meses de prisión.
Dirceu, uno de los referentes históricos del PT que fundó Lula y un exguerrillero que combatió la dictadura brasileña, fue condenado por corrupción activa y asociación para delinquir, además de la prisión, a una multa de casi 350.000 dólares, según la sentencia leída en audiencia pública.
Por su parte Genoino, de 66 años y presidente del PT en la época del escándalo, deberá pagar con cárcel y una multa de unos 234.000 dólares por los mismos delitos.
El caso
Dirceu fue acusa- do de crear y comandar la red de corrupción que desvió dineros públicos para comprar votos de legisladores de la coalición a cambio de su apoyo a las iniciativas del gobierno, en un proceso conocido como el "mensalao", en referencia a las mensualidades que recibían.
De ahí que sea visto como el pez gordo en el mayor juicio por corrupción política celebrado en Brasil.
El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, que gobernó Brasil hasta finales de 2010, negó siempre cualquier responsabilidad en los hechos y fue excluido del juicio.
Con las condenas contra Dirceu y Genoino ya son seis los sentenciados del grupo de 25 políticos y empresarios hallados culpables.
El otrora poderoso exministro -aún en libertad- intentó en vano convencer a los jueces de la inexistencia de una red de corrupción durante el gobierno de Lula, y antes de dictarse condena en su contra ya había anticipado su decisión de permanecer en el país y cumplir con la orden de la Corte.
Dirceu fue varias veces presidente del PT fundado por Lula y coordinador de la campaña que por primera vez llevó al poder al carismático líder obrero.
En la década del 90, Dirceu fue elegido dos veces diputado federal, y dejó su escaño en 2002 para ocupar el Ministerio de la Casa Civil (Presidencia), uno de los cargos más cercanos al presidente.
A raíz del escándalo se separó del gobierno y fue destituido de la Cámara de Diputados en 2005 e inhabilitado electoralmente hasta 2015.
Con las condenas de ayer, el Supremo Tribunal Federal inició la etapa de condenación de los llamados responsables del núcleo político del "mensalao" que completará Delubio Soares, extesorero del partido de Lula.
Oposición
En tanto, senadores de la oposición al gobierno de Lula afirmaron que la condena de Dirceu es un avance hacia el fin de la corrupción en Brasil.
A pesar de considerar que la pena debía ser mayor, Marcos Valério, PSDB, y el senador Alvaro Dias, del PR, dijeron que lo importante es lo que la condena significa para el país.
Algunos de los implicados
Silvio Pereira (secretario general del PT). Llegó a un acuerdo para no ser juzgado y debió hacer 750 horas de trabajo comunitario.
Roberto Jefferson (diputado). Denunció la compra de votos. Responde a los procesos de corrupción pasiva y lavado de dinero.
Luiz Gushiken (diputado, secretario de Comunicación y coordinador de campañas del PT). El procurador general de la República, Roberto Gurgel, pidió que sea absuelto.
Kátia Rabello (presidenta del Consejo de Administración de Banco Rural). Responde a demandas por mala gestión y lavado de dinero.
Bispo Rodrigues (fundador de la Iglesia Universal). Enfrenta cargos por corrupción pasiva y lavado de dinero.
Duda Mendonca (asesor de imagen de Lula). Responde a un proceso por lavado de dinero en Bahamas.
Marcos Valério (responsable de la distribución de los pagos mensuales). Perdió todos los contratos que tenía con el gobierno.
Valdemar Costa Neto (diputado). Responde a los procesos por soborno, conspiración y lavado de dinero.
Emerson Palmieri (primer Secretario del partido PTB). Confirmó la recepción millonaria de manos del empresario Marcos Valério. Responde a la acusación de soborno y lavado de dinero.
Henrique Pizzolato (militante del PT desde sus comienzos, director de campaña de Lula). Se le acusa de lavado de dinero malversación y cohecho.
(Publicado por El País - Uruguay, 13 noviembre 2012)
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