Importaciones
Argentina y Brasil ya negocian un nuevo acuerdo automotor
Un mayor control aduanero sobre las autopartes de extrazona, con idénticos aranceles por parte de todos los países del bloque, es el eje a partir del cual la Argentina y Brasil comenzarán a reformular el nuevo Protocolo Automotor Bilateral, cuyas negociaciones comenzarán a fin de mes. El nuevo acuerdo automotor regirá desde julio de 2013 y estará focalizado en reducir las importaciones autopartistas desde países no integrantes del bloque, que en 2011 sumaron el equivalente a 37.000 millones de dólares (la mayoría de esas importaciones, cabe aclarar, son concretadas por las propias terminales radicadas Brasil y Argentina como insumos para ensamblar vehículos).
La Argentina importó durante 2011 autopartes por el equivalente a 11.400 millones de dólares, de los cuales US$ 6.100 millones provienen de extrazona y otros US$ 5.300 millones son de autopartes brasileñas.
Según anunció la semana pasada la ministro de Industria, Débora Giorgi, ya acordó con su par brasileño, Fernando Pimentel, que todas las autopartes producidas en Brasil y Argentina serán consideradas como “nacionales” a ambos lados de la frontera, a la vez que se cobrarán idénticos aranceles (hoy existe dispersión en ese renglón) a las autopartes de extrazona.
Esos lineamientos son impulsados en particular desde Itamaraty, la cancillería brasileña, que desde la crisis de 2008-2009 b usca cerrar el camino a las importaciones provenientes desde China.
A la vez, un rápido acuerdo en uno de los sectores industriales más sensibles (el acuerdo automotor es incluso anterior a la creación del Mercosur) serviría para cerrar filas entre los gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner y Dilma Rousseff.
Queda pendiente el problema crónico de la balanza comercial: un déficit autopartista con Brasil de más de US$ 3.000 millones al año.
(Publicado por el Clarín - Argentina, 14 agosto 2012)