El presidente Evo Morales denunció que la presidenta de Chile, Michelle Bachalet, y el canciller Heraldo Muñoz, vulneran el reglamento de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) al revelar detalles del contenido de la demanda por derechos sobre el Silala y anunció que el 3 de julio de 2018 no solo se presentará la contramemoria sino la contrademanda por el recurso natural.
" (Bolivia) rechaza categóricamente las declaraciones vertidas por la presidenta de la República de Chile, Michelle Bachelet, y su canciller Heraldo Muñoz, que no solo vulneran las disposiciones reglamentarias de la corte al revelar de forma interesada e inexacta los alcances de la disputa, sino que provocan abiertamente un debate público en los medios innecesario”, afirmó.
La posición fue expresada en una conferencia de prensa realizada en el Palacio de Gobierno en respuesta a Bachelet, quien ayer poco después de recibir una copia de la memoria entregada a la Corte dijo que el documento contiene “evidencia geológica e hidrológica para afirmar que el Silala es un río internacional". Además aseveró que "Bolivia no puede pretender apropiarse de aguas que son compartidas".
Muñoz afirmó, por su parte, que el documento demuestra "de manera inequívoca que el Silala es un río internacional y lo ha sido durante 8.400 años según la evidencia científica", pero también sostuvo que autoridades bolivianas reconocieron durante un siglo que el recurso en disputa era un río internacional y añadió que "cambiaron de versión" en 1999.
El agente bolivianos ante la demanda por el Silala, Eduardo Rodríguez, fue notificado con la presentación de la memoria.
Morales recordó esta mañana que el reglamento de la Corte establece que el contenido de los documentos en este tipo de casos debe mantenerse en reserva hasta tanto se disponga lo contrario, por lo que su administración –aseguró- cumplirá con las limitaciones y “no hará referencia alguna a su contenido”.
Bolivia reivindica que el recurso, ubicado en el cantón Quetena Chico, Potosí, nace y muere en su territorio, y que fue desviado en 1908 de forma artificial hasta territorio chileno sin ningún tipo de compensación. Santiago activó una campaña para explicar los argumentos de su demanda y dijo que no canalizó el agua sino que construyó obras para evitar su contaminación.
Morales confirmó además que el 3 de julio, fecha límite de presentación de la contramemoria, también se presentará la contrademanda contra Chile en defensa del recurso natural.
"Como corresponde, el gobierno de Bolivia procederá al análisis minucioso de cada uno de los argumentos presentados, los cuales serán debidamente contrastadas con la documentación con la que contamos con la cual nuestro equipo de expertos nacionales e internacionales preparará la respectiva contramemoria y contrademanda hasta el 3 de julio de 2018", anunció.
Chile se anticipó a la acción jurídica anunciada por La Paz.
Con la presentación de la memoria, se activó la fase escrita de alegatos que dará paso a una fase oral en la que se harán públicos los argumentos de las partes. Bolivia también demandó a Chile ante la CIJ para que cumpla sus compromisos de negociar una salida soberana al Pacífico, que arrebató tras la invasión y posterior guerra de 1879.
Sobre la contrademanda, el artículo 80 del reclamento de la CIJ establece: La Corte solo podrá admitir una demanda reconvencional si entra dentro del ámbito de su competencia y tiene conexión directa con el objeto de la demanda de la otra parte".
Morales cuestionó que Santiago presente una demanda cuando reconoce que usa el 100% del agua del Silala.
Memoria
Hasta el Palacio de La Moneda llegó el canciller Heraldo Muñoz para entregar a la Presidenta Michelle Bachelet la memoria de la demanda contra Bolivia por el río Silala.
El documento, que busca probar que el río es un curso de agua internacional, será entregado durante esta jornada por el equipo jurídico de Chile a la Corte de La Haya en los Países Bajos.
Cabe destacar que la demanda fue interpuesta por el gobierno chileno en 2016 luego de las constantes declaraciones del presidente boliviano, Evo Morales, donde insistía en que su país era propietario total de las aguas del Silala.
“Nuestras discrepancias surgen porque Bolivia dice ser propietaria del río negando a Chile el derecho a usar sus aguas y acusando que nos hemos apropiado ilegalmente del recurso”, explicó Bachelet.
“Bolivia no puede pretender apropiarse de aguas que son compartidas”, aseveró la Mandataria. “Para nosotros es fundamental resguardar este recurso hídrico que ha surtido de agua a varias localidades y que actualmente está siendo usado por Codelco”.
“La decisión de presentar la demanda ante la Corte Internacional de Justicia no fue tomada de manera rápida, nosotros intentamos solucionar por vía diplomática estas diferencias, sin embargo en última instancia nos vimos en la obligación de tomar acciones legales para proteger nuestros derechos”, acotó la jefa de Estado.
En esta línea, la Mandataria enfatizó que “Chile es un país que se apega al derecho internacional y que cree profundamente en la solución pacífica de las controversias. Hoy estamos dando una muestra más de nuestra confianza en las instancias que la comunidad internacional ha creado para resolver pacíficamente dichas controversias”.
Asimismo, la Presidenta destacó "el amplio apoyo y respaldo que la acción de recurrir a La Haya ha tenido en distintos sectores del país y agradecer el trabajo de quienes han elaborado la memoria".
Argumentos de Chile
Según detalló Bachelet, "nuestro país lo que le ha solicitado a la Corte es que declare que el río es compartido y que el uso que hacemos de él es un derecho que nos otorga el derecho internacional consuetudinário".
“Nuestra demanda está respaldada por argumentos muy sólidos entre los que se encuentra el hecho que Bolivia reconoció el carácter internacional del río por más de 100 años, posición que cambió abruptamente en 1999 sin ninguna justificación”, añadió.
Asimismo, la jefa de Estado sostuvo que "Chile cuenta con todos los antecedentes científicos para probar ante la Corte que estamos frente a un río que cruza de Bolivia hacia Chile, disponemos en este sentido de suficiente evidencia geológica, hiroquímica, geomorfológica, biológica e hidrológica para afirmar sin duda que el Silala es un río internacional".
"Pero el dato más claro y simple es que la topografía del lugar baja desde los 4400 metros en Bolivia hasta los 4200 en nuestro país, por lo que el agua sólo puede correr hacia Chile", culminó la Presidenta.
(Publicado por La Razón - Bolivia y La Tercera -Chile, 4 julio 2017)
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