La justicia
de Sao Paulo ordenó bloquear bienes del grupo industrial francés Alstom por 282
millones de reales (unos 104 millones de dólares) por un caso de corrupción en
contratos de energía, dijo el martes el fiscal de la causa.
La orden
judicial cursada en la noche del lunes se encuadra en un caso de corrupción
"de extrema gravedad", según el fiscal del patrimonio público de Sao
Paulo, José Carlos Blat.
La
investigación busca probar la existencia de desembolsos ilegales por parte de
la filial brasileña de Alstom a funcionarios públicos para lograr beneficios en
los contratos. Uno de los agentes públicos involucrados es Robson Marinho, ex
Consejero del Tribunal de Cuentas del Estado de Sao Paulo.
"La
acción de improbidad continúa, porque se trata de un caso de corrupción de
extrema gravedad, donde además del contrato fue aceptado un soborno de
corrupción pasiva y activa entre Marinho y otros agentes públicos y Alstom de
Brasil", señaló Blat este martes a la TV local Globo News.
Marinho fue
apartado de sus tareas el año pasado, dijo el fiscal.
El tribunal
a cargo dijo a la AFP que el proceso se encuentra en secreto de sumario y no
podía dar detalles del caso que, según medios locales, es sobre un proyecto de
transmisión de energía en el estado de Sao Paulo en los años 90.
La
encargada de prensa de Alstom para Brasil y América Latina, Mariana Maciel,
dijo que la firma no había "sido notificada".
"(La
empresa) reitera el cumplimiento de sus negocios con la legislación
brasileña", señaló a la AFP en un correo electrónico.
La causa
podría alcanzar a más personas "en la medida en que las informaciones de
la cooperación jurídica internacional vayan llegando a Brasil. Otras personas
también pueden ser procesadas", añadió por su parte el fiscal.
En
diciembre de 2014, las autoridades de Estados Unidos impusieron una multa
récord de 772.29 millones de dólares al grupo francés, acusado de corrupción en
varios países y en particular en Indonesia.
Alstom
reconoció que algunos de sus empleados pagaron sobornos a funcionarios públicos
en Indonesia, en Egipto y en Arabia Saudita, en las Bahamas y Taiwán para ganar
contratos.
Alstom
también es investigada en Brasil por su presunta participación en un caso de
corrupción vinculado a la licitación del metro de Sao Paulo, cuando se habría
asociado con otras empresas internacionales en un cartel para conseguir
contratos.
(Publicado por Agencias, 3 febrero 2015)
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